El 1 de septiembre, Plutón, el planeta de la transformación profunda, la regeneración, el poder, la resurrección, la destrucción, reingresa en el signo de Capricornio por última vez este antes de iniciar su largo viaje por el signo de Acuario. Este es un tránsito crucial, un cierre de ciclo que nos invita a reflexionar sobre lo que hemos experimentado desde 2008, cuando Plutón hizo su entrada definitiva en el signo de las estructuras, la responsabilidad, la ambición y el alcanzar las metas.
Este tránsito se va a dar hasta el día 19 de noviembre, aproximadamente 3 meses, pero venimos viviendo esta energía desde el 28 de noviembre del año 2008 cuando Plutón hizo su ingreso definitivo y triunfal al signo de Capricornio. Por ello, es tiempo de preguntarnos: ¿qué desafíos hemos enfrentado en estos últimos 16 años? Es momento de hacer un balance. Tal vez, algunos hayan vivido la sensación de que un hechizo maléfico cayó sobre sus vidas, como problemas de salud, pérdida de trabajo, económicos, pérdidas sentimentales; otros el sentimiento de no poder avanzar. Lo que nos va a pedir Plutón a estas alturas es el examen final, después de estos años hace su despedida y se va a llevar lo que quedó pendiente, lo que nos quita el poder personal.
Plutón nos muestra las partes que no se ven, las más oscuras; esto es algo así como las cloacas, el inconsciente, a nivel personal, dependiendo de la Casa en que tengamos a nuestra zona Capricornio.
Sin embargo, este reingreso se da en trino a Urano en Tauro y sextil a Neptuno, y a su vez sextil de Urano a Neptuno, formando lo que se llama “Cabeza de Barrilete”, una energía muy armónica pero que si no la activamos nosotros no produce los posibles resultados positivos en nuestra vida. El torrente energético se dirige a Neptuno que representa nuestros sueños, con lo que esta energía nos lleva a realizar los cambios necesarios para que podamos convertirnos en nuestros sueños, el anhelo que queremos conquistar, nuestro fuego del alma que resuena con lo que queremos ser, a desplegar nuestro mayor potencial.
Estos planetas mayores tienen la función de ayudarnos en lograr el equilibrio: Neptuno a desarrollar nuestro potencial, Plutón a deshacer aquello que ya no nos sirve y no nos hemos dado cuenta, y Urano nos trae el cambio, la innovación de generar, situaciones, relaciones y ámbitos nuevos.
Todo lo que suceda en estos tres meses es algo que necesariamente tiene que suceder, pero puede ser algo que no nos parezca nada nuevo porque esta energía ya nos es familiar, pueden cambiar las caras y las situaciones, pero es la misma, es esto de “ya lo he vivido”. Tenemos que dejar de lado el miedo, para aquellos que necesitan un empujoncito, sea lo que sea que suceda la vida nos va a estar diciendo por dónde es, para algunos va a ser referido a la experiencia de vida, para otros cómo nos valoramos, sobre nuestro entorno, nuestra familia, personas de nuestro entorno, vamos hacia una transformación liberadora que nos lleva al siguiente nivel de poder personal.
Plutón ingresando a Capricornio nos va a estar mostrando la estructura, que es lo que nos permite canalizar en la materia lo que se encuentra en el ámbito sutil (Neptuno), pero ojo! si no es la estructura adecuada nos puede impedir manifestar. Vamos a poder hacer los cambios necesarios de nuestra estructura para conquistar esa potencialidad, ese proceso de despliegue hacia la mejor y la más plena versión de nosotros mismos, nuestra plenitud.
No dejemos que nuestra atención se vaya hacia el afuera, a nivel social vamos a tener noticias importantes y shockeantes; pero no nos distraigamos, enfoquémonos en nuestro interior que es donde podemos hacer algo y lo único que depende de nosotros. Si nos volcamos al afuera le estamos dando nuestro poder de transformación a otros, es un momento para recuperar nuestro poder, valorar nuestra autoridad, analizar las metas a alcanzar y nuestra ambición, e ir por ello. Si no lo hacemos nosotros mismos es cuando Plutón saca su cara menos amable convirtiéndose en el destructor, que puede ser muy doloroso en el ahora, pero con el tiempo vamos a tener la perspectiva de que era necesario para nuestra evolución y vamos a agradecer que se haya llevado algo que obstaculizaba nuestro avance hacia el desarrollo personal.
Un abrazo infinito…
Astrid
